Bienvenidos una semana más a «¡Por fin es viernes!» el espacio de mi blog que, de cuatro entradas que tiene, la mitad han salido un sábado. Si la semana pasada fue complicada esta todavía más porque he tenido un día menos. Pero por suerte he descubierto, y ya lo manejo a la perfección, la herramienta para programar entradas con antelación (hacedme la ola y flipad). Bueno pero, ¿qué ha pasado esta semana?
Primero, que los llamados haters de UbiSoft, también conocida como Ubilol, BugySoft o El ángel caído (este nombre lo compartimos todos los que conocimos su edad de oro hace unos doce años), han vuelto a la carga. Cuando anunciaron (y sacaron) el Assassin’s Creed Syndicate (también llamado Shitdicate por los entendidos) las hordas haters se pusieron teclados a la obra para criticar el movimiento de UbiSoft de lanzar un juego por año. Al ser un movimiento de lo más populista, hubo mucha gente que se unió (como un servidor, a quien le encanta azuzar a las masas) para quejarse de las ansias económicas de la desarrolladora francesa. ¿Qué pasó entonces? Que logramos doblegar a uno de los principales pilares del Eje del Mal de la industria y dijo que no sacarían un Assassin’s Creed este año 2016. Lo que sucedió a continuación asombró a todos.
Realmente no, pero tenía que poner un clickbait para que siguierais leyendo. Lo que ha pasado ahora es que han dicho que quieren redimirse y hacer las cosas bien y que posiblemente el año que viene tampoco habrá Assassin’s Creed. Y la gente se ha venido arriba y deben de echar de menos eso de esputar bilis contra BugyLol porque ahora han criticado que no saquen un Assassin’s Creed diciendo cosas como «prefiero un Assassin’s malo al año que un año sin Assassin’s» y argumentos del mismo calibre. Honestamente, yo prefiero no volver a tocar en mi vida algo tan ruín, abyecto y aburrido como el Assassin’s Creed III y por si alguien duda de mi capacidad por autolesionarme con esto de los videojuegos, me lo pasé. En WiiU. En parte, algo de razón tienen los haters porque eso de que Ubi diga que quiere hacer las cosas bien es como cuando en la peli de South Park, Saddam Hussein dice que va a cambiar. Veremos con qué nos sorprende. También entiendo a esta gente porque, ¿si no sale un Assassin’s con bugs contra qué van a echar PEStes? Ahí lo dejo.
En cuanto a mí, vamos con… ¡Compras! Sorpresa, ¡he comprado videojuegos esta semana! Tres para ser exactos. La locura de la semana ha sido The Last Story para la Wii, que lo he visto a un buen precio y ha sido el momento. Este juego suele estar, de segunda mano, por más de 70€. No lo busquéis nuevo. El otro, el Star Wars Rogue Squadron III mejor conocido como Rebel Strike de Nintendo GameCube (y estoy más cerca de completar el catálogo perfecto de mi consola favorita). Y para terminar, el Tales of Zestiria que está de oferta en Steam. ¿Serán estas mis únicas compras del mes? Pues sí, me temo que sí.
Rogue Squadron III es considerado por muchos el precursor de Battlefront
¿Y a santo de qué he decidido darme por vencido un día 7 de octubre en esto de compras mensuales? Pues fácil y para toda la familia. Mi proyecto al que de momento he llamado la Landaulet Tipo 1 (soy un hacha para los nombres y lo sabemos todos). Que a modo de vista preliminar es así por dentro:
Una consola para emularlas a todas.
Aún queda para que podamos ver cómo será por fuera… Que no lo sé ni yo… Pero va a molar.
¿Y a qué he estado jugando ya para acabar? Pues a poca cosa…. A lo que más, Resident Evil Umbrella Chronicles porque mi novia me ha regalado un periférico para el Wiimote con forma de pistola que NECESITABA usar. Y la verdad es que cumple su función y me gusta más que el Wii Zapper. También el fin de semana estuve dándole caña como siempre al Vampire Bloodlines sobre todo tema de secundarias. Me está pareciendo un JUEGAZO. Muy tranquilo, bastante lento y pausado que se siente como el precursor del Fallout 3. En cuanto a 3DS le he dado después de 13 meses al…. ¡Bravely Default! Podéis reíros de mí porque lo di de lado gracias a un combate que no logré pasarme en su día (huelga decir que hay ciertos combates que se alargan más de media hora). El problema del combate es que era… Opcional. Secundario. No era necesario. Y claro, ahí estaba yo subiendo de nivel para ver si lograba vencer al tío ese. Ahora voy por donde tengo que ir y mi cuadrilla es como los cuatro jinetes del Apocalipsis. Lo he retomado con ganas.
¡Y nada más! ¡Nos vemos la semana que viene!
La Ludoteca de Gabriel 